La música puede mejorar el estado de ánimo, alegrarnos el día y nos conecta con las emociones. Incluso, puede potenciar la secreción de endorfinas o reducir los niveles de cortisol en la sangre.
Varios estudios han comprobado que la música puede reactivar circuitos que tenían olvidados los ancianos. Marta Cinta, primera bailarina del ballet de Nueva York en los años sesenta, estando inmóvil con alzhéimer en un geriátrico, volvió a mover los brazos, porque un terapeuta le hizo escuchar El lago de los cisnes.
La música también sirve para relajarnos, para aquellos días que necesites desconectar de los problemas, puedes tomar un baño mientras escuchas una canción.
La Federación Española de Párkinson (FEP) informa que hay más de 160.000 personas que sufren esta enfermedad en España. Varios estudios han comprobado que la musicoterapia es idónea para los pacientes de párkinson porque, gracias al ritmo de las canciones, se adquieren estímulos auditivos, de movimiento y concentración.
Desde la Ewha Womans University de Seúl, en Corea del Sur, en un estudio descubrieron que incluir la música en tratamientos contra el dolor agudo o crónico puede ayudar a reducir las molestias y el nivel de estrés, sobre todo, en pacientes con cáncer.
Jin Hyung Lee, autora del proyecto, revisó los ensayos de 9.147 participantes y comprobó que aquellas personas que recibían música en los ensayos terapéuticos la intensidad del dolor era menor, que aquellas personas que no fueron sometidas a intervención musical. Además, también se detectó una disminución en el uso de analgésicos.
El neurocientífico John R. Iversen explica que la musicoterapia mejora el aprendizaje de los niños con necesidades especiales, por ejemplo, los niños con dislexia, autismo o trastorno especifico del lenguaje.
Ada Francoy, escritora y premio Gloria Fuertes, también señala que la música «ha probado ser efectiva en la mejora del comportamiento, la concentración, la interacción con los otros, el habla, el ritmo, la capacidad de escucha, etc. Utilizar un recurso que crea cohesión de grupo, que baja los niveles de ansiedad y que funciona de puente para el aprendizaje otros de contenidos, parece a priori una buena idea con cualquier alumno».
«La música no reemplaza el currículum de los niños con necesidades especiales, pero es sin duda de gran ayuda para conseguir objetivos educativos», añade Francoy.
La educación musical mejora la memoria de los niños con necesidades especiales o sin ellas. Además, refuerza ciertos aspectos educativos que son los siguientes:
Cociente intelectual
La música activa ambos hemisferios del cerebro al mismo tiempo. Hay estudios que han comprobado que los niños que empiezan a estudiar música antes de los 7 años y continúan en la adolescencia, tienen un cociente intelectual de algunos puntos por encima de los niños que no estudian música.
Desarrollo del lenguaje
La música ayuda al desarrollo temprano de las redes del proceso auditivo en el cerebro. Además, con las canciones los niños aprenden nuevo vocabulario.
Lecto-escritura
Las actividades como aprender a tocar un instrumento, cantar o escuchar música mejora las habilidades de lecto-escritura.
Creatividad
Con la música los niños pueden expresar la creatividad y la imaginación.
¿Quieres aprender a tocar el piano?
Alrededor del año 1700, Bartolomeo Cristofori inventó el piano en su taller, inicialmente llamado ‘clavicémbalo col piano e forte’, más adelante se abrevió el nombre a ‘pianoforte’ y, finalmente, a ‘piano’.
El italiano creó unos 20 pianos, pero sólo se conservan tres, que están expuestos en museos y abiertos al público.
«Aprender a tocar el piano ofrece tanto a niños como adultos la oportunidad de desarrollar una habilidad que enriquecerá sus vidas para siempre», explica Kristina Kryzanovskaya, profesora de piano y solfeo.
Si quieres aprender a tocar este instrumento tienes que saber que aporta muchos beneficios para la salud:
–Mejora la coordinación: El piano mejora el movimiento de las dos manos. Además, tus dedos estarán en constante movimiento, por lo que este instrumento puede ayudarte a evitar padecer artritis.
–Quema calorías: Si decides tocar este instrumento puedes perder en una hora 150 calorías.
–Expresa emociones: Si eres una persona tímida o te cuesta expresar tus sentimientos, con el piano puedes expresarlos.
–Elimina el estrés: Si estás estresado por el trabajo, opta por tocar el piano porque te ayudará a relajarte. Las notas de este instrumento impulsan la segregación de serotonina en el cerebro.
–Creatividad: El piano mejorará tu creatividad y aprenderás a componer o interpretar una partitura.
–Previene enfermedades mentales: Otra de sus ventajas es que previene enfermedades mentales, porque cuando tocas el piano estás ejercitando el cerebro constantemente.
¡Apuesta por el piano porque como ves es un instrumento que aporta muchos beneficios!
