Lo primero que debemos saber sobre los dientes de leche es que no son los definitivos. Hablamos de los dientes que aparecen en los bebes a partir de los seis meses y que los niños mudan cuando tienen seis años en adelante. Estamos ante un proceso largo y que irá variando dependiendo de cada niño.
Los niños completan la dentadura con veinte dientes sobre los tres años. Estamos ante un proceso que lleva su tiempo, pues aparecen a los pocos meses de haber nacido.
Los primeros que salen son los incisivos de abajo y comenzamos a verlos a los seis meses de edad, seguidos de los incisivos superiores. Los dos dientecitos de arriba aparecen sobre los 8 meses de edad.
Después aparecen los incisivos normalmente los laterales, y aunque no casi no lo pensemos, porque no se ven, las muelas, que son las últimas en salir. Según van creciendo los dientes definitivos, comienzan a salir, empujando a los anteriores, lo que provocará que estos últimos pasen a desprenderse.
El momento en que se produce la caída de los dientes de leche, que acostumbran a ser 20 piezas, es algo que se hace aproximadamente, pues pueden producirse variaciones por motivos genéticos. Los dientes inferiores, que son los primeros que aparecen acostumbran a ser los primeros que caen.
¿Qué hacer cuando empieza a moverse un diente?
Una de las mejores recomendaciones que podemos hacer es no forzar las situaciones, pues puede llegar a pasar mucho tiempo desde que comienzan a moverse hasta que se va cayendo y los cambios pueden llegar a causar un daño en el diente que será el definitivo o la encía. Igualmente, merece la pena comentar que es fundamental evitar que se toque con la lengua u otros dientes que puedan provocar desprendimientos.
El caso es que cuando se encuentra bastante suelto y el movimiento es tan grande que molesta al niño cuando come o habla, es posible permitir que él se lo pueda quitar. Si cuando lo mueve no le duele, es que realmente se encuentra bien suelto.
¿Cuáles son los motivos por los que se caen los dientes de leche?
A la hora de saber las razones, en la Clínica Dental Collado Villalba, que llevan años tratando a multitud de pacientes, incluido los más pequeños, hablan de unas causas estrictamente naturales, que son las que hacen que el diente permanente, que se encuentra bajo la encía, presiona el diente de leche y se afloja progresivamente.
Los dientes van cayéndose dejando un hueco en el que podemos ver cómo aparece el nuevo diente. Los dientes que son definitivos, van desgastando las raíces de los dientes de leche, empezando a cambiarse hasta su caída.
Los dientes permanentes que salen son de mayor tamaño que los de la leche, por lo que las separaciones entre ellos van desapareciendo cuando caen. Los dientes nuevos, como son más grandes que los de leche, no se posicionan bien o no cuentan con el suficiente espacio para poder colocarse bien, saliendo por donde buenamente pueden.
Lo cierto es que según cambia la dentadura existen dientes que pueden llegar a salir torcidos, pero que cuando se va desarrollando el hueso maxilofacial y se va completando al alinearse por sí mismos.
El caso es que, cuando los dientes no tienen una buena alineación, los dientes definitivos aparecen al lado de los dientes de leche y no bajo de ellos, lo que hace que no se desgaste la raíz. Por lo tanto, van a aparecer en la boca ambos, lo que desemboca en que hay una doble fila de dientes.
Suele ocurrir más en los incisivos, siendo recomendable la información al odontólogo de cara a anticipar la caída del diente de leche, puesto que cuando el definitivo encuentra el hueco, se va desplazando ocupando el lugar vacío que exista.
Como has podido ver, los dientes de leche es un paso más en el caso del crecimiento del niño, lo que no es óbice para que vayamos a nuestro especialista en salud bucodental, pues de esta forma puede ir encaminándose a que su crecimiento sea el mejor y adquieran grandes hábitos de cara a su salud bucodental en la edad adulta, algo realmente interesante para que el futuro sea inmejorable y se reduzcan las posibilidades de problemas en este sentido.
Nuestra recomendación siempre es optar por una buena clínica dental, a ser posible con años en el sector y que tengan una inmejorable fama de profesionales y serios. En los últimos tiempos también hay muchas clínicas que optan por hacer lo más atractivas para los más pequeños las visitas a las clínicas para niños y adultos, algo que también es interesante de mirar.